FALSO
Los implantes mamarios no interfieren con la lactancia. La función de la glándula mamaria no se altera con la colocación de una prótesis.
Actualmente, con la técnica endoscópica se introducen los implantes a través de la axila y se colocan detrás de la fascia o aponeurosis muscular (no detrás de la glándula, no detrás del músculo) que es una “pielcita” que recubre el músculo y que separa el implante de los linfáticos mamarios y de la glándula en toda su totalidad.
Es decir, que nunca se tendrá contacto con la glándula mamaria y, por lo tanto, no intervendrá con su función.
Video explicativo